Sobre cómo las escritoras conquistan su voz de mujer en su obra, la experiencia de Natalia Ginzburg:
"El personaje principal era una mujer, pero muy, muy distinta a mi. Ya no desean a tanto escribir como un hombre, porque había tenido a mis hijos, y me parecía que sabía muchas cosas sobre la salsa de tomate, y aunque no las pusiera en el cuento, era útil para mi oficio que yo las supiera; de un modo misteriosos y remoto hasta esto servía para mi oficio. Me parecía que las mujeres sabían sobre sus hijos cosas que un hombre no puede saber jamás. "
No hay comentarios:
Publicar un comentario