THE MUSHROOM HUNTER by María Encarnación Carrillo

lunes, 4 de abril de 2016

SUSPENSE. CÓMO SE ESCRIBE UNA NOVELA DE INTRIGA de Patricia Highsmith (Anagrama, 1986)

Tras leer el libro "Diario de Edith" de Patricia Highsmith, cuya protagonista, una mujer casada que tiene un hijo, un marido y una familia normal ve como su hasta entonces apacible vida se desmorona cuando su marido la abandona, pierde su trabajo y su hijo linda en la frontera del crimen; decidí leer Suspense. Cómo se escribe una novela de intriga y ahondar en el concepto de suspense según la autora.
El libro es un manual en el que nos habla sobre el proceso de escritura de una novela de suspense, y lo divide en los siguientes capítulos:
  1. El germen de una idea.
  2. Básicamente, sobre la utilización de experiencias.
  3. El relato breve de suspense.
  4. Desarrollo.
  5. El primer borrador.
  6. Las dificultades
  7. El segundo borrador.
  8. Las revisiones.
  9. La historia de una novela: La celda de cristal.
  10. Algunas notas sobre el suspense en general.
En general, me encantan estas obras en las que un escritor nos cuenta cómo escribir. Son obras que suelo encontrar muy inspiradoras. Esta lo es. No me ha defraudado.
A propósito del primer capítulo nos encontramos con el siguiente consejo:

"Si eres capaz de divertirte durante todo el tiempo que te lleve escribir el libro, más adelante también divertirás a los editores y a los lectores."

Sobre el divertimento del escritor al escribir puedo aportar aquí mi granito de arena. Al igual que ella, he podido comprobar que lo que más me divierte es el proceso que se sigue al escribir; el producto final es importante, pero el proceso creativo por el cual tengo que pasar para llegar a ese resultado es fascinante, a la vez que redunda en un mejor conocimiento de mi "yo-escritora". 

Patricia Hihgsmith

domingo, 3 de abril de 2016

UNA HABITACIÓN PROPIA, Virginia Woolf (Booket, 1997)

"¿Qué necesitan las mujeres para escribir buenas novelas? Ante todo independencia económica y personal."
Virginia Woolf reflexiona entorno a esta cuestión en un ciclo de conferencias sobre literatura y mujer, que conforma una especie de ensayo en forma de relatos, en los que sus personajes centrales, siempre de género femenino, se encuentran en situaciones donde deberán hacer prevaler su condición de mujer ante una sociedad que las discrimina y las relega a un estatus inferior.
Leí esta obra después de leer los magníficos diarios de la autora, y quedé cautivada. Ahora vuelvo a releer Una habitación propia y me asombro con los párrafos que entonces subrayé, buscando en esas palabras el maná con las que alimentar mi deseo de escribir. De entre sus páginas, nos dice que:

"Sería una lástima terrible que las mujeres escribieran como los hombres, o vivieran como los hombres, o se parecieran físicamente a los hombres, porque dos sexos son ya pocos, dada la vastedad y variedad del mundo..."

Y recuerdo el gran descubrimiento que hice en cuanto a mis lecturas, mi voz al narrar y mis personajes; asombrada comprobé que predominaban entre ellos las voces masculinas. En los libros de mi biblioteca, y en mis creaciones la voz de hombre se levantaba, en cuanto al número, por encima de las mujeres como si de un tótem se tratara.
Y empecé a leer autoras, grandes desconocidas también para mi: las hermanas Brönté, Mary Shelley, Jane Eyre, Clarice Lizpector, Alice Munro, Ana María Matute, Gloria Fuertes, Toni Morrison...Y poco a poco, mi voz de mujer empezó a fluir en los relatos, una voz necesaria para mí, pues sin ella no podría escribir; y si lo hiciera, sería de una forma despersonalizada y estereotipada... un provechoso trabajo de elaboración personal donde pude conquistar, de forma creativa, por fin, mi voz: "una voz propia".